Tener un diario bíblico podría ser la herramienta que lleve tu tiempo devocional al siguiente nivel, abriendo el camino para profundizar y tener una mejor comunicación con Dios. Esta publicación expondrá los beneficios de llevar o escribir un diario, cómo puedes comenzar, los diferentes tipos de diarios bíblicos y qué hacer cuando estás estancado. Comencemos con los beneficios de llevar o escribir un diario. En su forma más básica, llevar un diario bíblico es simplemente leer y tomar notas. Esto puede ayudarte a llevar un registro de tu vida de oración, retener lo que lees en las Escrituras y registrar lo que Dios está haciendo en ti. Muchos estudios han descubierto que los estudiantes que toman notas de sus libros de texto recuerdan y comprenden más que los que no lo hacen, lo mismo sucede cuando llevas un diario durante tu tiempo devocional. Tomarte el tiempo para pensar y registrar lo que Dios te está hablando, puede hacer que bajes un poco la velocidad y te involucres mejor con las Escrituras. En otras palabras, profundizar. Otro beneficio, es que mantiene un registro de cómo te sientes, lo que está sucediendo en tu vida y de lo que Dios te está hablando. Si bien no hay reglas, ya que llevar un diario es tan individual como la escritura a mano de alguien, intenta comenzar leyendo un pasaje de las Escrituras. Ya sea que estés leyendo la Biblia entera, abriendo una página al azar, usando un devocional o una aplicación como Glorify, tómate un momento para reflexionar y hacerte algunas preguntas. ¿Qué está tratando de decir Dios aquí? ¿Cómo se relaciona con mi vida? ¿Cómo me está hablando Dios? Cuando se trata de poner el lápiz sobre el papel o caracteres en la pantalla, hay algunas formas diferentes de hacerlo.
Este punto es bastante autoexplicativo y probablemente el más común. Elige un pasaje de las Escrituras que te llame la atención de tu tiempo devocional. Ya sabes, el que lees y piensas, ¿quién me ha estado espiando? Escríbelo y medítalo. Piensa en lo que significa cada palabra, lo que Dios está tratando de decir y lo que puedes hacer al respecto. A continuación, permite que el Espíritu Santo te hable y registra lo que te dice. Algunos días puede que te quedes en blanco. En ese caso, escribe un pasaje de las Escrituras y déjalo así. Será un maravilloso recordatorio de lo que Dios te estaba hablando cuando lo vuelvas a mirar.
Esto es lo más cercano a un "Querido Diario", pero en cambio, es "Querido Dios". Precisamente el nombre lo delata, escríbelo como si estuvieras escribiendo una carta a un familiar o amigo cercano. En este caso, no tienes que guardarte nada. Incluye todas las partes feas, como lo harías en un diario. Escribe sobre tu enojo con ese colega problemático o tu matrimonio en medio de las dificultades. Escribe sobre tu dolor, tus secretos y tus miedos. Escribe sobre las formas en cómo Dios aparece y cómo ha trabajado en tu vida. Piensa en ello como una oración escrita. A menudo, mirando hacia atrás, verás cómo Dios se movió en tu situación y cuán fiel ha sido.
Hace unos años, la locura de colorear para adultos estaba en todas partes. Al ser elogiado por su capacidad para calmar una mente ansiosa y liberar la creatividad, no es de extrañar que se haya vuelto tan popular. El diario de la Biblia es similar. Excepto que, en lugar de colorear dentro de una imagen, implica elegir algunas palabras o líneas de las Escrituras y dejar fluir la creatividad. Puedes hacer esto decorando una Biblia con imágenes coloridas y escritura decorativa o incluso escribiendo notas en los márgenes. No tiene que ser en una Biblia física; también puede ser en un diario. Para algunas personas, llevar un diario bíblico eleva las Escrituras de la página y las hace más identificables. Centrarse en responder, creativamente, a las Escrituras ayuda a que las palabras se asimilen. Después de todo, Dios es el creador maestro.
El diario de gratitud te ayuda a concentrarte en la bendición de Dios, en lugar de en tu falta. Empieza por escribir tres cosas por las que estás agradecido cada día. A veces, la tarde es más fácil que la mañana, ya que ha pasado un día completo. Tómate un tiempo para agradecer a Dios por cada una de estas cosas. [caption id="attachment_2341" align="alignnone" width="1708"]
Foto de Priscilla Du Preez[/caption] Cualquiera de estos tipos de diario se puede realizar en papel o incluso digitalmente. Glorify tiene una sección de la aplicación que hace que sea fácil escribir tu diario. Guarda las escrituras o citas que te llamen la atención y usa la sección de notas para escribir sobre ellas, utilizando las ideas anteriores. ¡Ayuda! Las palabras no salen. ¿Qué haces cuando te quedas estancado? Todos hemos estado allí. Inseguros de dónde empezar, topándonos con un bloqueo mental, sin inspiración.
En el mundo creativo, existe un sistema llamado "Páginas Matutinas", creado por Julia Cameron, diseñado para la recuperación creativa y para que las cosas fluyan. Es fácil tomar este concepto y aplicarlo al diario cristiano. Comienza abriendo una página nueva en tu diario, o mejor aún, usa hojas sueltas, ya que es posible que desees tirarlas, tómate un momento para respirar y luego escribe. Y aquí está el truco: no te detengas a pensar en lo que estás escribiendo; solo escribe lo que salga. Esta no es una carta para el presidente. ¿A quién le importa si hay errores ortográficos o si nada tiene sentido? ¡Puede ser que todo lo que escribas sea una tontería! No dejes que tu cerebro consciente, que lo sobreanaliza todo, se interponga en el camino de tu alma. Nadie verá estas páginas. Ni siquiera tienes que volver a leerlas. Deja salir tus preocupaciones, inquietudes, celos, alegrías y felicidad; todas esas cosas que te están molestando en el fondo de tu mente. Si escribir la misma palabra una y otra vez ayuda, hazlo. Comprométete a tres páginas al día. Al principio, puede parecer incómodo, pero con el tiempo se sentirá natural. No te quedes estancado en los detalles. Un diario debe ser único para cada persona. Algunos estarán llenos de dibujos y tinta de colores, mientras que otros tendrán una letra perfecta y prolija en cada página, y algunos serán digitales. Lo importante es la comunicación con Dios y su Palabra.