Familiarizarte con la oración mientras luchas con la depresión puede ser un paso poderoso en tu camino hacia la sanidad. No hay que subestimar el impacto de la depresión. Pero tampoco hay que subestimar el amor y el cuidado de Dios por nosotros, ni su compromiso de estar con nosotros, incluso en los momentos más difíciles. Si actualmente estás luchando contra la depresión, o conoces a alguien que lo esté, este blog puede ayudarte. En Glorify reconocemos que la depresión está presente en todas partes, incluida la iglesia, por lo cual, ofrecemos recursos bíblicos que te ayudarán en tu camino hacia la libertad, el gozo y la esperanza en Cristo.
Comprender la oración y hacer de ella una prioridad en tu vida puede desempeñar un papel importante a la hora de superar la depresión. La oración, no es más que hablar con Dios. Es una conversación que nos permite descargar en Dios todas nuestras emociones, miedos y preocupaciones. Cuanto más oramos, más fácil nos resulta invitar a Dios a entrar en los aspectos realmente dolorosos de la vida, las cosas en las que hemos perdido la esperanza o de las que no hablamos con nadie.
Filipenses 4:6-7: " No se preocupen por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús." Santiago 5:16b "La oración del justo es poderosa y eficaz." Mateo 7:7 "Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá." 1 Tesalonicenses 5:16-18 "Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús." Marcos 11:24 "Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración y lo obtendrán." Romanos 12:12 "Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración."
Quizá la forma más importante en que la oración puede afectar positivamente a tu salud mental es revelándote y recordándote que no estás solo. La depresión y los problemas de salud mental pueden aislarte mucho. Quizá sientes que no eres capaz de hablar de ello o quizá no tienes a la persona adecuada a la que acudir, muchas personas acaban luchando solas contra la depresión. La Biblia nos enseña que Dios quiere estar con nosotros en los días buenos y en los malos. Que está con nosotros en el camino y que nunca nos dejará ni nos abandonará. La oración puede tener un efecto radical en la salud mental. Esto se debe en parte a que te recuerda y te conecta con una verdad importante: no estás solo. Al orar, podemos cambiar nuestro miedo por la fuerza de Dios y nuestras preocupaciones por la fe. También podemos liberar todo nuestro dolor, nuestra ira, nuestro rechazo en las manos de Dios. A cambio, Él nos llena de paz, alegría y esperanza. Puede sonar demasiado bueno para ser verdad; pero ésa es la buena nueva del cristianismo. Jesús murió en la cruz y resucitó, haciendo posible que vivamos íntimamente conectados con Dios, hoy. Esa conexión nos aporta una alegría y una plenitud como ninguna otra, a medida que descubrimos quiénes fuimos creados para ser y cómo fuimos diseñados para vivir. Si no sabes por dónde empezar con la oración, ¿por qué no empiezas meditando en tu versículo bíblico favorito? Elige uno que te resuene especialmente y léelo una y otra vez, pidiendo a Dios que hable mientras lo haces.
La oración puede tener un poderoso impacto en la salud mental, especialmente cuando se trata de la depresión. He aquí cinco formas en que la oración puede ayudar:
Si tú o alguien que conoces está luchando contra la depresión, considera la posibilidad de incorporar la oración a tu rutina diaria. No tiene por qué ser complicada ni larga, basta con que dediques unos momentos al día a conectar con Dios. Cuando oras, conectas con un Dios que te ama. También vislumbras Su perspectiva y llegas a escuchar Su corazón para ti y tu vida. Esta conexión gratificante y el cambio de perspectiva son dos poderosos antídotos contra la depresión. Lo mejor es orar de la forma que te resulte más natural. No hay nada bueno ni malo en la oración. Sólo tienes que encontrar una forma de expresar auténticamente a Dios lo que piensas y sientes. Puedes apoyarte de las oraciones guiadas de Glorify, diseñadas para conectar con Dios diariamente. Puede que sea el impulso que necesitas para empezar a sentirte mejor. Y recuerda que buscar ayuda profesional también es siempre una buena idea. La oración y la terapia pueden ir de la mano para mejorar tu salud mental y tu bienestar.
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