Cuando llegamos al final del día, ¿cómo podemos asegurarnos de acabar bien? En esta época tan ajetreada, a veces se siente como si tuviéramos que exprimir al máximo cada minuto, es por ello que creemos que puede ser útil empezar y terminar el día con propósito. Leer la Biblia antes de irnos a la cama puede ser realmente poderoso ya que llena nuestros corazones y mentes con la sabiduría del cielo justo antes de descansar. Si estás teniendo problemas para conciliar el sueño, recuerda que en Glorify app puedes encontrar una gran diversidad de herramientas para que puedas dormir en paz. Tenemos Historias Bíblicas para dormir, meditaciones para dormir, oraciones para dormir y mucho más.
Imagina este escenario: has tenido un día muy malo, sólo quieres desconectarte y ver Netflix antes de irte a la cama, pero te quedas dormido delante de la tele y te despiertas por la noche, con frío e intranquilo. O tal vez te has peleado con un amigo o un compañero y, cuando apoyas la cabeza en la almohada, esa pelea no deja de pasarte por la mente una y otra vez. ¿Hay una forma mejor de acabar el día? ¿Cómo podemos desprendernos del día que acabamos de vivir, sea bueno o malo? Cuando acudimos a Jesús al final del día, buscando la luz de su sabiduría, cambiamos nuestras penas por su alegría. El Salmo 30:11 dice: "Convertiste mi lamento en danza; me quitaste la ropa de luto y me vestiste de alegría". Jesús quiere lo mejor para nosotros, y en Su sabiduría, eso significa venir a Él diariamente, poniendo nuestras cargas y alegrías a Sus pies, a cambio de Su paz y alegría.
Incluso cinco minutos son mejores que no venir en absoluto. Reflexiona sobre el día que acabas de vivir. ¿Por qué estás agradecido? Da gracias por ello. ¿Por qué estás enfadado, triste o confuso? Piensa en tu día y trae cualquiera de estas emociones a Dios. Entrégale a Dios tus cargas y pídele Su paz. Pregúntale a Dios qué quiere mostrarte ahora sobre estas emociones, y cómo puedes avanzar hacia el mañana.
1. "Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes". (1 Pedro 5:7) Estamos invitados a acudir a Él y depositar nuestras cargas. Y ayuda mucho decirlas o escribirlas. 2. "Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados; yo les daré descanso. Carguen con mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy apacible y humilde de corazón, y encontrarán descanso para sus almas. Porque mi yugo es suave y mi carga es liviana." (Mateo 11:28-30) Jesús nos invita a vivir como Él vive, a descansar en el Padre. 3. "La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden". (Juan 14:27) A cambio de nuestras cargas, Jesús nos da Su paz. 4. "En paz me acuesto y me duermo, porque solo tú, Señor, me haces vivir confiado.". (Salmo 4:8) Sea lo que sea a lo que nos enfrentemos, Jesús vela por nosotros mientras dormimos, y puede levantar nuestras pesadas cargas y cambiarlas por Su paz. 5. " Por lo tanto, no se preocupen por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas." (Mateo 6:34) Deja tus preocupaciones en Dios y descansa sabiendo que el mañana está en Sus manos. Jesús tiene palabras de vida. Él sabe lo que es mejor para nuestras almas, así que aprende de Él. Toma un día a la vez.
Padre, Ayúdame a acudir a ti cada noche, a traerte mis alegrías y mis penas. Tómalas y enséñame a vivir la vida de la manera que tú quisiste, libre como tu hijo(a). Amén.
Download Glorify Today