Alguna vez te has preguntado ¿Por qué es importante el bautismo? Esta práctica ha tenido un gran significado en la fe cristiana durante miles de años y en este artículo queremos compartirte 3 razones que sustentan su importancia.
Jesús fue bautizado por su primo Juan en el río Jordán. Y, cuando Jesús salió del agua, los testigos presenciales vieron algo parecido a una paloma -que representaba al Espíritu Santo- posada sobre Él. De hecho, las Escrituras enseñan que los espectadores oyeron una voz que venía del cielo que decía. "Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él." Mateo 3:17 Las tres personas estaban presentes y activas, encargando a Jesús que comenzara Su ministerio terrenal en la tierra. El capítulo 28 de Mateo contiene las últimas palabras de instrucción de Jesús a sus seguidores. El acto del bautismo sigue siendo una poderosa expresión de fe y obediencia para los cristianos de hoy: "Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo." Las instrucciones de Jesús a Sus discípulos sostienen el valor del bautismo como acto de obediencia por parte de quienes lo eligen. Y los nuevos creyentes caminan hacia una vida establecida en obediencia a Jesús y a Su misión.
El bautismo es una demostración sagrada de la elección de dejar atrás la vida anterior de pecado y separación de Dios. Los creyentes demuestran públicamente su nueva vida e identidad en Cristo mediante el acto del bautismo. Ser bautizado es un paso significativo en una vida de fe pues nos identifica con Cristo y la iglesia. Jesús fue bautizado. Y Jesús ordenó a los cristianos que bautizaran a otros. En consecuencia, los primeros líderes de la Iglesia también enseñaron la importancia del bautismo. Así pues, aunque no hace falta bautizarse para creer en Jesús, sigue siendo un hito significativo en la vida de un cristiano y su declaración pública de la fe.
"¿Acaso no saben ustedes que todos los que fuimos bautizados para unirnos con Cristo Jesús en realidad fuimos bautizados para participar en su muerte? Por tanto, mediante el bautismo fuimos sepultados con él en su muerte. De modo que, así como Cristo resucitó por el glorioso poder del Padre, también nosotros andemos en una vida nueva." Romanos 6:3-4 En consecuencia, al elegir seguir a Cristo, los nuevos creyentes también pertenecen ahora a Su familia, la Iglesia Global. El acto del bautismo significa la intención del individuo de ser un miembro activo y comprometido de Su iglesia de forma constante y comprometida.